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Lejos de estereotipos adolescentes y fantasías televisivas, la historia escrita por Josefina Fernández, Daniel Castro y Manuela Infante muestra una juventud actual, real, directa, sin adornos ni mundos color de rosa, con un lenguaje coloquial en personajes absolutamente identificables.
La dirección de Cristián Jiménez y Matías Bertilotti nos transporta a la acción a través de una cámara que retrata con naturalidad lo intimo, lo cotidiano, las problemáticas del día a día de una familia común y de una juventud a la que se le tilda de descarriada cuando solo se siente perdida y busca encontrar su lugar en el mundo.
Las inseguridades, los conflictos, los miedos, las decepciones, el coraje vacío y las ganas de querer vivir la nueva etapa que se nos presenta, el fiel retrato de una edad de transición en que se experimenta la rebeldía hacia los padres, el sexo y las drogas, el dolor del amor y el desencanto, todos lo viven por igual, el de clase humilde como el de la clase acomodada todos sufren en secreto y lo manifiestan a su modo.
Una joven argentina que debe dejar todo lo conocido al cambiarse de país, un joven cuyo mundo se derrumba al morir su madre, una chica desinhibida que oculta su soledad en los excesos y un chico de baja autoestima junto al abusador que esconde su homosexualidad y la chica caprichosa, conforman el grupo adolescente que luchan con sus soledades, incomprensiones y problemáticas propias de la edad, matizado por los dramas adultos que son narrados cual diario de vida, a buen ritmo, sin saturar ni aburrir.
Las actuaciones están equilibradas, Camila Mateos sabe llevar de buena manera el peso protagónico, lo mismo Mariana Loyola, quien de desenvuelve con naturalidad en los distintos roles y estados que enfrenta en la serie. Lucas Sáez, Paulina Moreno, Andrew Bargsted, Gerardo Chendo, Cristián Carvajal y Samuel González están excelentes en sus roles.
Destacable es además la fotografía a cargo de Andrés Jordán y Jorge Roberto Fernández, la musicalización de Caroline Chaspoul y Eduardo Henriquez. Magnifica elección tener a Valdivia como locación central, una ciudad con una riqueza visual poco expuesta en el ámbito audiovisual.
Una joven argentina que debe dejar todo lo conocido al cambiarse de país, un joven cuyo mundo se derrumba al morir su madre, una chica desinhibida que oculta su soledad en los excesos y un chico de baja autoestima junto al abusador que esconde su homosexualidad y la chica caprichosa, conforman el grupo adolescente que luchan con sus soledades, incomprensiones y problemáticas propias de la edad, matizado por los dramas adultos que son narrados cual diario de vida, a buen ritmo, sin saturar ni aburrir.
Las actuaciones están equilibradas, Camila Mateos sabe llevar de buena manera el peso protagónico, lo mismo Mariana Loyola, quien de desenvuelve con naturalidad en los distintos roles y estados que enfrenta en la serie. Lucas Sáez, Paulina Moreno, Andrew Bargsted, Gerardo Chendo, Cristián Carvajal y Samuel González están excelentes en sus roles.
Destacable es además la fotografía a cargo de Andrés Jordán y Jorge Roberto Fernández, la musicalización de Caroline Chaspoul y Eduardo Henriquez. Magnifica elección tener a Valdivia como locación central, una ciudad con una riqueza visual poco expuesta en el ámbito audiovisual.
Una relato real, cercano y entretenido.
¿QUÉ TE PARECE?
Me encanta esta serie
ResponderBorrarVi pedazos en la transmisión en vivo de TVN, pero después la vi por VOD y me gustó mucho, ojalá haya segunda temporada
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