LA FAMILIA DE AL LADO

Cuando TVN dijo que quería recuperar el horario de las 20 horas hablaba en serio, pués se la jugó al 100% con una gran propuesta y usando exitosas formulas ya probadas.

La historia de José Ignacio Valenzuela tiene los ingredientes necesarios para hacerla atractiva, misterio, amores imposibles, suspenso y un supuesto crimen por resolver. Además de enigmáticos y atractivos personajes; Temas tan variados como la infidelidad, las mentiras, la desconfianza, la violencia intrafamiliar, el bullying, entre otros fueron presentados en la primera semana, cuyo atractivo genera interés en cada miembro de la familia, debido a la dispersión temática que hay en cada capítulo.

Es una teleserie ágil, de pocos personajes, como en las nocturnas, con una edición rápida, a veces demasiado, ya que hay ocasiones en que no se alcanzan a digerir las escenas del todo, además impide un mayor desarrollo de los personajes, hay poca profundidad en ellos hasta ahora, lo que visto desde la postura del juego que nos presentan, es un plus, pués a ningún personaje lo conocemos bien y cualquiera nos puede sorprender, creando más intriga.

Las ambientaciones bien logradas, aunque con una iluminación plana, siendo una teleserie de misterio, el juego de luces y sombra sería un aporte. Lo otro criticable es que caen nuevamente en contar historias con personajes ABC1, lo que tantas veces se le criticó a Canal 13 en su tiempo, para la historia está bien, pero debería haber una variedad en las teleseries.

En el reducido elenco el canal se fue a la segura, colocando a grandes y queridos actores en roles ya probados, como a la gran Coca Guazzini (Eva) como la altanera, controladora, fría y adinerada dueña de casa, a Jaime Vadell (Renato) como el empresario jefe de hogar, a Álvaro Rudolphy (Gonzálo) como el protagonista que nos lleva a la acción, Francisca Lewin (Carola) como la rebelde que tanto fue alabado en "Complices" además nuevamente de pareja de Cristian Arriagada (Leonardo/ Hugo) que funcionó en las juveniles "16" , "17" y en esta tambien, además de la ya clásica pareja Zabaleta/Swett, aunque esta vez de manera distinta.

Las grandes sorpresas actorales vienen de parte de Jorge Zabaleta, quien se luce como el celópata Javier, desmarcándose de sus anteriores roles para mostrarnos un registro totalmente opuesto a lo antes visto y Cristián Arriagada en el dobre rol de los gemelos Costa, uno supuestamente muerto que aparece cuando lo recuerdan (A través de Flash Back) y otro Lisiado, postrado en una silla de ruedad, que apenas puede comunicarse, todo un logro, destacable en él, que se caracteriza por un tipo de actuación distante y ahora se muestra deshinibido, expresando sentimiento a través de miradas y limitadas gesticulaciones; En ambos roles se nota un estudio profundo de personaje y en las ganas de hacerlo bien y creible, pués tenían las herramientas para que los respectivos roles se convirtieran en maqueta y no ha sido así.

Destacada tambien es la labor de Luz Valdivieso (Ignacia) quien sabe manejar el misterio para con sus personajes, no sabemos si es buena, mala, víctima o victimaria y eso encanta, se muestra indefensa, tambien segura de sus actos, es un enigma, sus matices confunden y esa es la idea.

Álvaro Rudolphy y María Elena Swett funcionan como nueva pareja telesérica, sus roles de Gonzálo y Pilar se entienden y ven bien, además tienen los elementos clásicos de teleseries de antaño, una gran atracción, infidelidad, un amor imposible y varios motivos que hace imposible verlos juntos a pesar que por el encanto de ambos el público ya quiere verlos seguir el mismo rumbo; Un gran acierto.

Entiendo que las historias semi comicas de los sirvientes es para que el espectador descanse entre tanta tensión, pero las interrupciones son tan bruscas, que en un entorno de misterio y densidad las escenas de infidelidad del chofer con las nanas parece un verdadero spam.

Excelente por María Eugenia Rencoret, Victor Huerta, "el Chascas" y todo el equipo realizador, pués apuestan a ganador con esta teleserie que tiene la gran misión de recuperar el horario vespertino y de seguir así lo lograrán.

Una buena excusa para reunir a la familia en torno a un televisor como antaño, una gran alternativa que ya nos ha generado varias interrogantes y promete seguir sorprendiendonos.

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